El Campello cambiará su normativa para endurecer “de forma considerable” las multas por verter escombros tras detectarse nuevos focos
Cuando la pedagogía no surte efecto, es necesario adoptar otras medidas para poner freno a comportamientos incívicos. El Ayuntamiento de El Campello estudia elevar “de forma considerable” las sanciones por vertido de escombros en la vía pública o parajes rurales, después de que se haya comprobado fehacientemente varios focos que afean el entorno y perjudican al medio ambiente.
Hoy mismo, tras recibir una llamada vecinal, el alcalde Juanjo Berenguer y el concejal de Medio Ambiente, Rafa Galvañ (PP), se han desplazado al barrio Pla de Sarrió, donde han podido comprobar con indignación que alguien ha depositado decenas de sacos con escombros junto a los contenedores instalados en la calle Ruperto Chapí y en el descampado anexo.
Se trata, en esta ocasión, de cientos de kilos de residuos de obra, para los que existen depósitos especiales, y que necesariamente requieren contratar un contenedor especial. La investigación policial ha permitido identificar al infractor, que ha sido sancionado de forma inmediata.
Precisamente la obligatoriedad de contratar un contenedor es lo que hace que, en los tiempos actuales, los incívicos actúen de esta forma, dado que según señala Rafa Galvañ, “alquilar un contendor especial resulta ahora más caro que hacer frente a una multa”.
Por ello, el departamento que dirige el edil estudia ya elevar las sanciones “de forma considerable” para conseguir que estos vándalos respeten la ley. Hoy, esas sanciones van de los 100 a los 300 euros.
Mientras tanto, seguirán poniéndose multas. En los últimos 12 meses se han impuesto 15 multas por verter escombros, enseres, o restos de poda.
Para llegar al nombre de varios responsables de los vertidos han sido definitivas las cámaras de vigilancia instaladas por todo el término municipal. “Hemos identificado a varios infractores que accedían a un camino vecinal cargados y minutos después lo abandonaban de vacío”, denuncia el edil, que pide colaboración vecinal para denunciar y actuar contra estas personas.
La Ordenanza Municipal Reguladora de recogida de residuos y limpieza pública de El Campello data del año 2003, “y las multas que entonces se consideraban potentes ahora se han quedado obsoletas”, dice Rafa Galvañ. “Pero eso lo vamos a solucionar pronto, y se mantendrá la obligación de dejar el espacio como se encontró, así como justificar que los residuos se han depositado en un gestor autorizado”.